Sentí un profundo orgullo y emoción al ver a esta joven fuera de serie, llamada Yulimar Rojas, saltar por los aires hasta lograr lo que pocos logran, romper un record olímpico y un record mundial en una misma jornada, y así hacer historia en los Olímpicos de Tokio 2020.

Esta joven que se alzó con la preciada medalla de oro, con esta hazaña se convirtió en la primera mujer venezolana en ganar un oro olímpico, y en la única, hasta el momento en alcanzar los 15,67 metros con un impresionante salto, superando la marca olímpica de la camerunesa Francoise Mbango de 15,39 m y el récord mundial de 15,50 m que la ucraniana Inessa Kravets obtuvo en 1995, antes de que Rojas naciera.

Su historia nos habla de orígenes muy humildes, de sueños, de valentía, tesón y ambición, valores que pueden ser tomados como ejemplo de vida para cualquier emprendedor que trace sus metas.

Esta venezolana de 25 años de edad y una imponente estatura de 1,92 metros, mostró un crecimiento vertiginoso entre su participación en las Olimpiadas de Río 2016 y Tokio 2020, tiempo en el que pasó de considerar como principal competencia a la colombiana Caterine Ibargüen, a considerarse a sí misma como su propia competencia.

“Yo estaba emocionada con la selección de voleibol que había clasificado a los Juegos Olímpicos de Beijing, pero cuando fui al polideportivo no había entrenadores de voleibol, y fueron los de atletismo los que me vieron, y de inmediato se fijaron en mí”, así cuenta Yulimar que fueron sus inicios en el atletismo.

Fue una circunstancia que marcó su vida porque ya en el 2011, obtuvo su primer logro  internacional en el Campeonato Sudamericano Juvenil de Atletismo en Medellín, Colombia, en el que venció en salto alto, con 1,78 metros, de allí siguió batiendo récords y coleccionando medallas hasta ganarse su puesto en los Juegos Olímpicos de 2016. Y fue allí cuando ganó su primera medalla olímpica de plata en triple salto con marca de 14,98 metros, ubicándose detrás de su principal e histórica rival, Caterine Ibargüen.

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Este segundo lugar, no la amilanó ni la detuvo, por el contrario, la motivó a trazarse como gran meta ser la mejor del mundo, sueño que hizo realidad en el 2021.

“Un sueño hecho realidad, ¿qué te puedo decir? Campeona Olímpica, recordista mundial aquí en Tokio y un sueño que tenía desde chiquilla, hoy se materializa y estoy muy feliz de poder vivir esta experiencia (…) Soy ahora la chica más feliz del planeta”.

Yulimar me inspiró a convertir toda esta emoción en acción y preguntarme, que puede haber más allá de esas metas trazadas en metros, de sueños cumplidos y de hazañas deportivas, y como podemos plasmarlas en nuestras vidas y negocios.

Con esta inspiración desarrollé estas claves y lecciones que hoy quiero compartir contigo:

Sé humilde. Yulimar creció en un hogar junto a sus seis hermanos en un humilde barrio de Puerto La Cruz, en el oriente de Venezuela. La humildad no solo formo parte de su realidad sino además de su forma de ser. Siempre tiene una voz de aliento y reconocimiento hacia sus compañeros de equipo, incluso hacia su competencia.

“El sueño nació en la casita de lata, que se mojaba, me daba miedo con las tormentas, con las lluvias, se movía y ahora soy una Yulimar Rojas consagrada. Es un ejemplo de lucha y de constancia, de que si crees y luchas por tus sueños los puedes conseguir”.

Motívate. Entrena a diario dando el 120% en cada jornada, no acepta hacer menos. Mismo rigor y disciplina la implementa en su alimentación.

También en cada competencia y salto se le puede observar levantando sus brazos para motivar a los presentes en las gradas a aplaudir a un mismo compás para marcar su rápida carrera y posterior salto a la gloria.

Así se motiva Yulimar, levantando la vara con cada meta alcanzada.

Mantén el foco. “Siempre he dicho que quería ser la primera mujer en conseguir una medalla de oro olímpica en Venezuela. Siempre lo he tenido presente, siempre ha estado allí latente en mi corazón y es lo que me ha levantado cada día, es lo que me ha hecho ser lo que soy”, estas fueron las palabras de Yulimar al lograr cumplir su anhelada meta, testimonio que se traduce en autenticidad, metas claras, enfoque y perseverancia.

Ambicioso en tus metas. Para esta atleta de élite la excelencia se mide en metros. Trazar una nueva marca mundial y nuevo record olímpico es su nueva aspiración. Dirás que ya lo logró, pero la mente de Yulimar ya está trabajando para superarse a sí misma, e ir a los 16 metros.

“Los 16 metros es una meta muy presente en mi vida, y ya me quedé bastante cerca. Cada día lo tengo bien fiado que se hace más patente la posible marca de 16 metros, y, mira, yo soy una atleta que no se pone límites, no tengo techo. Yo puedo conseguir lo que mi mente y mi corazón quieren. Los 16 metros es parte de mi lucha diaria”.

Visualiza.Las mujeres podemos llegar a lo más alto y hacer historia”, esta ha sido la visión de Yulimar. Lo ha dicho: “Es algo que quiero con todo mi corazón, mi enfoque está en la medalla olímpica. Sé que habrá buenos resultados y será un verdadero espectáculo”.

Busca siempre un mentor. No basta contar con las condiciones físicas para hacer historia, tras cada triunfo y record de todo atleta hay un gran mentor. En el caso de Yulimar Rojas, la presencia y guía de Iván Pedroso, su entrenador, ha sido determinante para su preparación.

Yulimar tenía 19 años y fue a través de Facebook que contacto al ex atleta olímpico en salto de longitud y ganador de una medalla de oro en Sidney 2000, para que la entrenara.

Yo no sabía si me conocía, si me había visto en alguna competencia. Antes de escribirle tuve miedo porque, ¡guau! ¡Iván Pedroso! Yo no era nadie, no tenía títulos, pero pensé que lo peor que me podía pasar era que no me contestara. Y en su primera respuesta estuvo muy bien. Me dijo que ya sabía quién era, que ya había visto algunos videos míos. Luego fuimos concretando, me ofreció irme a entrenar a España con él y al llegar… aún recuerdo la primera vez que me dio la mano. El día que le escribí en Facebook marca un antes y un después para mí”, confiesa Yulimar.

Estas son solo algunas de las claves que han marcado el éxito de Yulimar Rojas, que segura estoy nos seguirá regalando lecciones, así como momentos de emoción y orgullo. Mismas claves que te invito a reflexionar y asumir como propias y que sueñes a partir de ahora, en batir tus propios record y resultados.