Se me antoja iniciar la orientación de hoy con una frase de Benjamín Franklin, político, científico e inventor estadounidense, que, aunque nació en 1706, su pensamiento y visión se mantiene en plena vigencia. La vigencia propia de las grandes verdades. Franklin, en su virtuosa polimatía reflexionó a cerca del riesgo de las deudas, y dijo: “Es mejor acostarse sin cenar que levantarse con deudas.”

Se trata de una frase llana y clara, pero no por ello menos profunda. Ella encierra el mejor de los consejos que se pueda dar: En primer lugar, te invito a ser realista y previsivo, estudia minuciosamente la ruta de los ingresos, honra tus deudas, recorta los gastos y costos, no derroches y, ajusta y planifica. No incurras en el error de la mayoría a la hora de enfrentar una contingencia por deudas, no te enfoques, ni dirijas el 100% de las energías en atender la contingencia, debes atender la causa. Porque las deudas que solventes hoy, sino atacas el problema de raíz, serán las deudas del mañana.

Este sabio consejo también fue desarrollado por Mike Michalowicz, gurú de las finanzas, emprendedor, ex analista financiero de The Wall Street Journal y creador de la fórmula Profit First, quien establece además que, aun cuando tú y tu negocio tengan deudas hasta el tope, debes mantener tus ganancias como prioridad, y pagarte a ti primero. Una práctica que debes convertir en hábito para mantener el negocio saludable y arreglar el problema de manera permanente.

Para poner fin a tus deudas, te invito a ser realista y previsivo, estudia minuciosamente la ruta de los ingresos, honra tus deudas, recorta los gastos y costos, no derroches y, ajusta y planifica

Y para mantener la salud de tu negocio en óptimo estado y libre de deudas, te invito a tomar como propias, estas buenas prácticas:

Haz del ahorro un disfrute. Siente el placer de ahorrar más que el de gastar, porque si quieres salir de las deudas, debes disfrutar más ahorrando dinero, de lo que disfrutas gastándolo.
Procura alegrarte y felicitarte al ver tus fondos crecer y ver aumentar tu porcentaje de ganancia.
Redirigiendo el placer hacia el ahorro, estás entrenando a tu mente a igualar felicidad y celebración con elegir ahorrar dinero en lugar de gastarlo.
No caigas en la trampa del mejor mes. No seas falsamente optimista, nunca asumas tu mejor mes como referente para promediar los ingresos del mes, porque cuando enfrentes una temporada de caída de ingresos, estarás desprevenido y sucumbirás a las deudas.

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desde el primer día

Observa tu ingreso promedio de los últimos doce meses, compara tu mes actual con ese mismo mes del año anterior. Este análisis comparativo te dará una clara idea de donde te encuentras.

Usa el porcentaje como parámetro: El ingreso varía. Unos meses pueden resultar excelentes, otros pésimos y otros regulares. Lo que no varía es el porcentaje.
Los porcentajes están basados en resultados reales: el dinero que está en el banco. Si tienes más dinero en la cuenta del que te pagas como sueldo, la diferencia queda y se acumula. Con ello, blindarás los meses lentos y el dinero acumulado en tu cuenta de compensación del dueño y tu sueldo sigue siendo consistente.

Usa el congelador para tus deudas: El congelador de deudas es un sistema para guiar a tu negocio para pagar rápidamente las deudas acumuladas y congelar las nuevas, sin dejar de lado tu hábito de negocio saludable.

Con ello buscas reducir costos, no poner en riesgo tu negocio. ¿Cómo lograrlo?

1. Ten a mano el estado de cuenta actual de tus ingresos de los 12 últimos meses, así como un informe actualizado de tus cuentas por pagar, incluidas las tarjetas de crédito y cualquier otro estado de cuenta relacionado con deudas.
2. Revisa línea por línea cada gasto, pasado y presente, y procede a marcar con una “G” los gastos que generen ganancias, “R” a los gastos que pueden ser reemplazados por una alternativa más barata y con una “I” para resaltar los gastos innecesarios.
3. Clasifica con estas letras igual todos los gastos, incluyendo sueldos, comisiones y bonos de los empleados, la renta del espacio de la oficina, equipo, servicios de salud, materia prima, suscripciones.
4. Identifica los gastos recurrentes y su periodicidad.
5. Suma todos los gastos del año, todo lo que identificaste y etiquetaste. Solo excluye en esta suma los gastos de impuesto, sueldo o distribución del dueño. Ahora divide ese número
entre 12 para determinar tu mes promedio. El resultado será la cantidad necesaria que necesitarías para cubrir el mes.
6. Haz un plan para reducir gastos. Comienza por reducir tus gastos “I”, busca alternativas para bajar tus gastos “R”, y evalúa los gastos “G” para ver si los puedes estructurar de una manera más favorable.

Cómo lograr El Estudio Rápido del Tiempo

Y mi recomendación principal es: Actuar ya para acabar con las deudas. Inicia implementando el congelador de las deudas, ataca las deudas sin dejar de ahorrar y enlista tus deudas de menor a mayor.
Veamos mejor el paso a paso:

1er Paso. Cancela todos los pagos recurrentes y desecha todo lo que no necesites. Establece como meta reducir tus gastos mensuales 10% por debajo de lo que arroje la evaluación de la salud de tu negocio.
2do Paso: Cuando procedas a distribuir las ganancias, 99% del dinero dirígelo al pago de la deuda. El 1% restante a tu compensación. De esta forma, atiendes la deuda de una forma agresiva pero sin dejar de fortalecer el hábito de poner en primer lugar la ganancia. Comienza con este hábito hoy mismo y, al final, ese 99% lo podrás destinar a levantar y mantener tus reservas de efectivo y
tu propia distribución que como dueño te corresponde.
3er Paso: Ordena tus compromisos y sal de las pequeñas deudas primero. En la medida que liquides todas tus cuentas con pagos recurrentes, los pagos que vas liberando pueden ser destinados para cancelar la siguiente deuda de la lista.

Recuerda que tu meta con estas estrategias es sanear el negocio de las deudas, atacando la raíz del problema y no el síntoma de la enfermedad. La clave yace en cambiar la mentalidad para que logres disfrutar más ahorrar, que gastar.

Si te interesa este tema y conocer aún más a cerca de la fórmula Profit First para hacer de las crisis financieras un asunto del pasado, contáctame y con gusto te guiaré en esta senda para que juntos construyamos un negocio saludable.