En las empresas medianas y pequeñas, donde los recursos tienen que ser cuidadosamente gestionados, el conocer con claridad el margen de rentabilidad de cada producto o línea de productos, te permite mejorar la rentabilidad y el flujo de efectivo de tu empresa. Aprender a determinar el margen de ganancia de tu negocio es tener el poder de decisión en tus manos.

A veces, por comodidad, por temor a los números o con la excusa del tiempo, los empresarios incurren en el error de dejar todos los cálculos en manos de los contadores y no se ocupan ni siquiera de requerir reportes o datos tan relevantes como los márgenes de ganancias de sus productos o servicios, insumos que son determinantes para el futuro del negocio, ya sea corregir, impulsar o hacer cambios en sus líneas de productos.

Por ejemplo, al tener control de la información sobre los márgenes de ganancias netas y brutas, puedes determinar qué productos no están contribuyendo a las ganancias, cuáles requieren un impulso adicional, o a qué producto debe ajustarse el precio o su costo, entre otras tantas decisiones que te permitan tener un negocio que genere más ventas, más ganancias y más riqueza, pues, para eso invertiste tu capital y te arriesgaste en hacer realidad tu sueño.

El margen de ganancia es la diferencia a favor que espera obtener una empresa.  Representa el pago que reciben los dueños de un negocio por el desarrollo de su actividad empresarial, por arriesgar su dinero, por su esfuerzo y por su dedicación.

El margen de ganancias es la diferencia a favor que espera obtener una empresa. En otras palabras, representa el pago que reciben los dueños de un negocio por el desarrollo de su actividad empresarial, por arriesgar su dinero, por su esfuerzo y por su dedicación, ya sea de servicio, producción o por la comercialización de un producto. También se resume como la diferencia entre los costos y el precio de venta de un producto o servicio.

Al referir al margen de ganancia se habla de dos tipos, la ganancia bruta y la ganancia neta.

La ganancia bruta es el valor final que obtienes tras la venta de un producto, al cual le restas los costos que se emplearon en su producción. Tan sencillo como si vendes un producto en $120 y su producción tuvo un costo de $55, tu ganancia bruta es de $65.

Ahora bien, la ganancia neta es el resultante de la resta del valor final, menos todos los gastos generales de la empresa. En este caso, se incluyen los impuestos, las comisiones, electricidad, internet, agua y otros servicios.

Hacer este cálculo no es una tarea en extremo compleja, si debes contar para ello con información pormenorizada de tus costos de venta y producción, entre otros insumos. Para guiarte en este propósito he realizado un ejercicio para demostrarte el paso a paso de cómo puedes lograrlo, veamos:

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Ten, a mano, toda la información actualizada. El primer paso es contar con toda la información de tus productos, con sus costos de producción y reportes de ventas.

Saca la calculadora. Procede, en primer lugar, a restar lo que costaron los bienes vendidos de los ingresos que las ventas generaron, esto te dará tu ganancia bruta.

Ahora, toma esa ganancia y divídela por el costo del producto que vendiste. En este caso, deberás dividir $65 entre $55. El resultado será $1,18.

Como paso final, transforma ese decimal en porcentaje. Para ello, procede a multiplicar el decimal por 100, así logras calcular el margen de ganancia bruta. Si el resultado fue 1,18 por 100, obtienes entonces 118 %. Este sería el porcentaje de la ganancia bruta para ese producto en específico.

En el caso de la ganancia neta, debes sumarle a los costos de producción todos los demás gastos inherentes al funcionamiento del negocio. En razón de ello, debes considerar que el margen de ganancia neta siempre será de un porcentaje menor al de la bruta por la suma de valores, y que, al contemplar todos los gastos de la operación, es un factor capaz de brindarte un espectro completo sobre la salud de tu negocio.

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Mide la temperatura de tu negocio con periodicidad. Es importante que como dueño de negocio estés al tanto del potencial de ganancia de cada producto, para ello te recomiendo hacer, semanalmente, la revisión de ventas por categoría o por línea de producto. Con este reporte podrás estimar la meta sobre la contribución de cada línea de producto con respecto al total de las ventas.

Ten en consideración que el éxito del negocio no siempre radica en la cantidad de productos que vendas, sino en su rentabilidad.

He allí la importancia de mantener al día el cálculo de los márgenes de ganancia, porque ello te permitirá ser oportuno y efectivo a la hora de tomar decisiones en tu negocio, como, por ejemplo, ajustar los precios de ventas y de costos de los productos y servicios que dispones, e incluso finiquitar algún producto de la línea.

Sé estricto en el control del flujo del dinero en tu negocio. No es solo tarea de tu contador, para que un negocio sea saludable, requiere de un sistema de control de costos y gastos. Hazlo en función de tus posibilidades y capacidades, pero es necesario que hagas el esfuerzo por comprender todos los factores que influyen en los ingresos de tu negocio.

Avanza en la comprensión en detalle de los procesos de tu negocio, y de requerir apoyo en esta tarea, sabes que cuentas para ello con tu ActionCOACH más cercano.