Vivir sin preocupaciones financieras es una situación posible y lo que mueve a muchos hombres de negocio. El dinero, es un recurso necesario para alcanzar algunas metas en la vida y poder disfrutar de experiencias, lugares o a bienes y servicios.

La riqueza no solo consiste en tener un nivel de vida holgado y sin preocupaciones económicas, también implica tener tiempo, salud y visión para disfrutar la vida con las personas que amas, dando a tu vida un sentido de trascendencia, al tender la mano a aquellos que lo necesitan. El dinero es, por tanto, un instrumento que vale la pena conseguir, sin una valoración positiva o negativa en sí misma, es solo un medio que te ayudará a lo largo de tu vida, si sabes cómo administrarlo.

La riqueza no solo consiste en tener un nivel de vida holgado y sin preocupaciones económicas, también implica tener tiempo, salud y visión para disfrutar la vida. Debemos tener una relación sana con el dinero

Para tener una relación sana con el dinero, puedes seguir estos pasos:

Primer paso. Marca el rumbo. Tómate el tiempo para analizar cómo quieres que sea tu vida y para qué quieres alcanzar la riqueza y la libertad financiera. ¿Solo lo quieres acumular? O te proyectas haciendo de tu entorno un lugar mejor, gracias a la inversión que hagas.

Segundo paso. Prepárate para una contingencia. Los imprevistos son situaciones que acontecen de manera abrupta, pero no por ello tienen que tomarte desprevenido. Por lo tanto, te propongo crear tu fondo de emergencias. Mientras generas suficiente riqueza con tu negocio, puedes ir ahorrando en una cuenta, para hacer frente a cualquier contingencia que pueda surgir.
Este dinero lo ahorrarás en una cuenta de no fácil acceso y será tu «colchón» de tranquilidad para darte tiempo a pensar en cómo levantarte de nuevo cuando algún evento suceda.

Tercer paso. Di adiós a las deudas. Una forma de motivarte a ahorrar y alcanzar la libertad financiera es logrando pequeñas victorias, y puedes conseguirlas saliendo primero de las pequeñas deudas. Este paso es fundamental, las deudas son un lastre que no te permitirán avanzar hacia ninguna dirección.
Para ello evalúa la cantidad de dinero que puedes disponer cada mes para pagar tus deudas, luego ordena tus compromisos de menor a mayor, en la medida que vayas pagando una deuda, ese dinero lo utilizarás para la siguiente. Mientras te enfocas en la primera, en el resto paga el mínimo, y ahorra en gastos, intenta incrementar tus ingresos, y avanza al siguiente paso.

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Cuarto paso. Crea un fondo de 6 meses de gastos. El dinero ahorrado es tu respaldo para brindarte un piso más sólido en cada etapa hacia tu libertad financiera. Es por ello que ahorrar debe convertirse en un hábito para ti.
Si ya tienes un fondo de emergencias y comenzaste tu plan de pagar todas tus deudas, ahora tu próximo objetivo es Incrementar tus ahorros al punto que te permita cubrir de 3 a 6 meses de gastos. Calcula cuánto requerirías para vivir un mes y multiplícalo por 3 meses en una primera etapa, para luego incrementarlo y multiplicarlo por 6 meses.

Quinto paso. Invierte en un fondo para tu retiro. Si has cumplido disciplinadamente los pasos anteriores, este es el momento de invertir.
Tu futuro es tu mejor inversión, por ello, te invito a pensar en iniciar con una inversión de 15 % de tus ingresos en una cuenta de fondos mutuos o fondos indexados, y posteriormente, aumentar el porcentaje de inversión. Con ello, estarás asegurando tu futuro financiero y el bienestar de tu familia.

Sexto paso. Ahorra para la educación de tus hijos. La educación de los hijos es un tema que agobia a muchas familias, pues el costo de enviar un hijo a la universidad es bastante alto. Para evitar un colapso de tus finanzas en el futuro, te invito a prever un plan de ahorro para garantizar los estudios de los chicos.
Indaga en las instituciones bancarias los distintos planes que ofrecen para este propósito, y arranca ya a ahorrar.

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Séptimo paso. Paga la hipoteca de tu casa rápidamente. Llegado a este avanzado punto del plan corresponde ahora dedicarte a pagar lo más pronto que puedas el préstamo de tu vivienda, si es que tienes. Ten presente que mientras más rápido honres esta deuda, menos intereses pagarás, y el dinero te rendirá más. Imagínate vivir sin el peso del pago de una hipoteca.

Octavo paso. Deja un legado: A este nivel de holgura financiera tu enfoque debe estar en invertir tu dinero inteligentemente para maximizar tus ganancias, procurando en todo momento no incrementar tu nivel de gastos.

Como verás se trata de aprender a organizar el dinero y controlarlo, para evitar que él te controle a ti.

Ya estás sin deudas, tus ingresos cada vez son más sustanciales, por lo que te invito ahora a asumir un nuevo ejercicio con tus finanzas. Divide tu flujo de caja en tres partes, tú decides cuánto dispondrás para cada una de estas metas:
a) Disfruta tu dinero (comprar algunos lujos, viajar…)
b) Ahorra
c) Da generosamente

Esta última meta es vital y engloba la lección a la que quiero llegar ¿De qué sirve amasar fortuna, si solo piensas en ti mismo?

La riqueza cobra verdadero sentido cuando la usas para transformar, cuando usas tus recursos para invertirlos en causas en las cuales crees. Piensa en el legado que dejarás a futuro y en cómo te gustaría ser recordado.

No es un trecho fácil de andar y requerirá de trabajo duro, sacrificio, esfuerzo y mucha disciplina, seguro cometerás errores, pero poniendo siempre el foco en el propósito principal, retomarás y corregirás el curso hasta lograr tu libertad financiera. Si desperté tu interés en este tema, pero temes emprender el camino solo, busca la orientación de un ActionCOACH, este se encargará de despejar todas tus dudas, y, te acompañará hasta lograr que cumplas todas tus metas.