“Una persona espiritualmente abierta puede ser mejor vendedor que quien solo se interesa por su compensación”. Grant Cardone del libro “Vendes o Vendes”

Con esta cita iniciamos nuestro viaje por un área, tal vez extraña para algunos y poco explorada por otros, nos referimos a lo espiritual en la comercialización o la venta de tus productos o servicios.

¿Quién no desea ser el mejor vendedor?

El querer ayudar debe ser la verdadera esencia en tu proceso de venta, no el acto como tal de cerrar el trato. La clave está en prestarle mayor atención al cliente, hacia quien debes dirigir toda tu energía, asumir la mejor actitud y dar el más alto nivel de servicio.

Tal como se señala en el libro “Vendes o Vendes”: “Dar y dar y dar te asegura vender y vender y vender”

Si cada día pones en práctica estos principios, obtendrás  clientes con una mayor satisfacción, fidelidad y agradecimiento por hacerlos sentir bien servidos.

Es una máxima de vida, mientras más des, lo que das se te retribuye. Piensa en dar, en ayudar más y menos en la venta como tal.

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Ofrece y ofrece

Entregarse por completo al cliente, es predecir sus necesidades, ofrece y ofrece, dale lo que busca, resuelve  y ayúdalo a tomar la decisión de compra.

Demuéstrale que piensas como él, que eres capaz de entender sus expectativas y, al mismo tiempo, satisfacerlas.

Evita las interrupciones mientras estés frente a frente con tu cliente, sin distracciones. Recuerda que si pretendes atender dos y tres asuntos al mismo tiempo, corres el riesgo de descuidar a alguno de ellos o a todos.

Demuestra a tu cliente que él es la persona más valiosa para ti de todo el universo. Si logras hacerlo, serás recompensado. Comúnmente las personas se sienten ignoradas, haz que tu cliente sienta lo contrario contigo, dale toda tu atención, de principio a fin.

Sin detenerte a pensar en lo mucho o nada que te vayan a comprar, o lo cuesta arriba que te resulte convencerlo de que te compre algo, dale toda tu atención al cliente, hazlo sentir como en casa.

Más valiosos que el dinero mismo

“Los seres humanos son más valiosos que el dinero, trátalos como tales y serás recompensado”.

Haz tuya esta cita de Grant Cardone, y ten presente que, en cada venta, debes estar dispuesto, siempre, a servir a las personas, no solo venderles.

“Los mejores vendedores que he conocido no son los que hablan más rápido si no los que saben servir”

Los vendedores exitosos son aquellos que se preocupan más por sus clientes y en función de ello se atreven a ir más allá de lo que otros suelen hacerlo. La meta con cada cliente es encontrar maneras de mejorar su calidad de vida.

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Analiza y cuestiónate en la venta

Si tus clientes te reclaman por tus precios, piensa tal vez que, para ellos, el servicio que le das no está resultando suficiente, si fuese lo contrario, no se quejarían y apreciarían la calidad del servicio que les brindas.

¿Qué busca la mayoría de las personas? Buscan el mejor servicio, no el mejor precio, se enganchan con la mejor presentación, el mejor producto.

El cliente debe sentir que estás a su disposición cuando te necesite, que de presentársele, en el camino, problemas u obstáculos, serás capaz de solucionarlos por él.

Venta significa ayudar, no solo convencer

El servicio es el único camino que te llevará a elevar tu valor de venta y deshacerte de la competencia.

La clave es sentir agrado al ayudar a la gente. Muchos vendedores han basado su estrategia en meros trucos, promesas y expectativas. Para  lograr tus ventas no necesitas trucos, lo que en realidad necesitas es estar dispuesto ayudar.

Ten en cuenta que  siempre habrá alguien interesado en competir, y por más bueno que sea tu producto, habrá alguien que lo mejore y pueda concretar sus ventas a menor precio.

Ahora bien, la diferencia la estableces con tu servicio. Un comprador estará dispuesto a pagar más, siempre y cuando reciba un buen servicio, una buena actitud, facilidad de compra que lo hagan sentirse especial, así que busca cómo lograr que tu atención sea distinta a la de los demás.

Dar una gran sonrisa, poner todo tu esmero y tener una buena actitud es dar un buen servicio, piénsalo. Si elevas tu nivel de interés por el cliente y te diferencias de los demás, muy pronto todos dejarán de quejarse de los precios y te comprarán a ti y a nadie más. El servicio siempre es más importante que las ventas.

Asume, en tu práctica diaria, la filosofía de dar, dar y dar y ofrece un servicio extraordinario. De esta manera verás aumentar tu nivel como vendedor y ganarás confianza. Serás capaz de sentirte mejor valorado,  ir a donde gustes, trabajar con quien desees y vender el producto que sea,  también disfrutarás de un estilo de vida libre de estrés y preocupaciones. Así que da todo de ti mismo y brinda un servicio sin igual.