Llegar a los años dorados hoy, más que nunca, se ha transformado en una experiencia positiva, el rápido crecimiento del número de personas mayores en todo el mundo está creando una revolución demográfica global y con ella, también cambios en los paradigmas.

Los avances de la ciencia, la tecnología, los cambios de hábitos alimenticios, la higiene, entre otros, han reducido los riesgos, y por ende, la proporción de la población mayor de 60 años en el mundo está aumentando más rápidamente que en cualquier era anterior.

De acuerdo a datos de la red global HelpAge International, en 1950 había aproximadamente 200 millones de personas se encuentran en la etapa de los años dorados años en todo el mundo. Para el año 2000, más de 550 millones, y para 2025, el número de personas con más de 60 años se espera que alcance los 1.200 millones.

Cada vez, más personas que se encuentran en los años dorados de su vida, que aún se sienten plenas y activas, que quieren seguir sintiéndose útiles y productivas. Bien valdría la pena que se plantearan emprender a esa edad.

Las expectativas de vida variaron, y para ese año, 2025, la fracción de personas mayores de 60 años será más del 10 por ciento en todos los países de América Latina y el Caribe.

Ahora bien, esto significa que, cada vez, más personas que se encuentran en los años dorados de su vida, que aún se sienten plenas y activas, quieren seguir sintiéndose útiles y productivas, también este número creciente de personas representa mayores necesidades y demandas, en palabras llanas, nuevos mercados.

Esto abre las puertas hacia dos grandes oportunidades: En primer lugar, se trata de una generación en crecimiento sostenido que va a estar demandando servicios y productos, y si eres un emprendedor con visión y sentido de oportunidad, deberías trazar planes y estrategias para sacarle el mayor provecho a este nicho, así que bien valdría la pena que pensaras en este grupo etario y todas sus posibles demandas.

Y en segundo término, y no menos importante, si tú perteneces a esta generación de años dorados, si formas parte de este grupo de personas, que te sientes activo, que estás en plena capacidad cognitiva, pero que, además, cuentas con un capital y experiencia, bien valdría la pena que te plantearas emprender a esta edad.

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Cada vez es más frecuente escuchar testimonios exitosos de  personas, en edad dorada, emprendiendo o estudiando una segunda carrera. Pero, para hacer esta experiencia exitosa, mi principal recomendación es el apalancamiento y la complementariedad.

No te lances solo a una aventura que va a demandar de ti esfuerzo físico o conocimientos tecnológicos que no dominas, sugiero apalancarte en un socio joven, que pueda complementarte a ti en aquellas cosas que a lo mejor no dominas.

Sería una simbiosis perfecta, entre una persona de los años dorados con un socio joven que le transmita energía e ímpetu. Los jóvenes llevan en sus genes las ganas de triunfar, no tienen miedo a los riesgos,  tienen mucha fuerza para trabajar, y las personas como tú, aportan la sabiduría y la experiencia.

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De cualquier forma, bien sea que quieras invertir en este mercado o que quieras emprender en tu edad adulta, aprovecha esta oportunidad, es un fenómeno que se está dando en todo el mundo,  y estoy segura que implementando los sistemas adecuados, con una mentalidad clara de negocio, puedes tener éxito en ambos propósitos, lo importante es dar el paso y atreverse a romper paradigmas.

El mundo está cambiando, ¿estás dispuesto a cambiar con él o te quedarás rezagado en el tiempo?, tú lo decides.