¿Te has preguntado qué es el éxito para ti? ¿Le has preguntado a tus allegados y amigos, qué conciben como éxito? Te aseguro que al comparar lo que cada quien piensa sobre el tema, todos tendrán un concepto distinto.

Lo que concibes como éxito dependerá de tres factores primordiales: de lo que el éxito represente para ti, de la disciplina y seriedad con la cual asumes tus metas y de la dimensión de tus aspiraciones.

Para desarrollar estas ideas voy a basarme en el libro “La Regla de Oro de los Negocios, de Grand Cardone,  quien habla de tres formas de enfocar el éxito, no solo para alcanzarlo, sino para mantenerlo.

El éxito dependerá de tres factores primordiales: de lo que el éxito represente para ti, de la disciplina y la seriedad

Clave 1. Es importante. El éxito es vital para tu bienestar. Brinda confianza, seguridad, capacidad de contribuir a un nivel más alto, es esperanza y liderazgo.

Es crecimiento continuo, pues sin evolución, cualquier entidad, sea una corporación, un sueño o incluso una raza entera, dejaría de existir.

La recomendación principal es que nunca debes reducir la importancia del  éxito, pues cualquiera que lo minimice deja de lado sus perspectivas de logro e incluso puede pasar el resto de su vida convenciendo a los demás de hacer lo mismo.

Sin importar las metas que intentes alcanzar, el éxito es absolutamente indispensable. Si dejas de preocuparte por él, dejarás de ganar y si dejas de ganar durante suficiente tiempo, terminarás dándote por vencido.

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Clave 2. Es tu obligación. Mira el éxito como un deber, una obligación o responsabilidad, deja de esperar a que llegue a ti.

La clave radica en asumirlo como un deber ético, un deber hacia tu familia, hacia tu empresa y tu futuro. Esto te ayudará a nunca perder ni el foco ni el propósito.

Observa al éxito tal y como los buenos padres asumen su obligación para con sus hijos; porque es una cuestión de honor, una obligación y una prioridad.

“El éxito es el resultado de los reclamos mentales y espirituales por poseerlo, seguido de los actos necesarios en el tiempo hasta que se consigue”. Grant Cardone. La regla 10x.

Clave 3. No es un bien escaso. El éxito no es un recurso con reservas limitadas, olvídalo, no es una lotería, ni un bingo, ni un golpe de suerte que favorece a un solo ganador. No, el éxito no es un bien escaso.

Ten presente que nunca habrá escasez de éxito porque la misma gente lo construye,  por ende, jamás escaseará, como en ningún momento faltarán las grandes ideas, las nuevas tecnologías, los productos innovadores y las soluciones frescas a viejos problemas.

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¿Quién te dijo que tú y yo no podemos lograr cuanto queramos y al mismo tiempo? Por ello, te invito a superar el mito de la escasez,  cambia el pensamiento y comienza a asumir los logros de otros como oportunidades para que ganes también.

Recuerda que en el momento que piensas que la ganancia de otro es tu pérdida, te limitas en términos de competencia y escasez.

No se trata solo de alcanzar el éxito, sino, además, de mantenerlo, por ello repito nuevamente  contigo las tres premisas de éxito: Concíbelo como importante, como un valor ético y sin ningún tipo de limitaciones.

A partir de este momento no esperes que el éxito llegue a ti como algo fortuito, búscalo aplicando estas tres claves y lo lograrás. Si quieres saber más cómo puedes cristalizar tu éxito, contáctame y juntos podremos desarrollar la mejor estrategia. ¡No te detengas!