Ser líder o convertirse en uno siempre requerirá una mejora continua para desarrollar esas habilidades que te van a permitir influenciar de forma positiva a los demás. Cuando eres empresario o dueño de negocio y recurres al coaching gerencial, puedes obtener el conocimiento para sobresalir en tus labores de liderazgo.

Tipos de habilidades gerenciales más frecuentes

No hay duda que gestionar personas para ejecutar tareas en grupo de forma armónica tiene su grado de dificultad. Mientras que unos lo pueden hacer con más naturalidad, otros necesitan afinar sus capacidades para lograrlo. Aun así, un gerente exitoso suele caracterizarse por demostrar:

  • Habilidades humanas. La interacción efectiva con otras personas es algo que no te puede faltar como directivo, ejecutivo o jefe. La cualidad de motivar, inspirar, saber escuchar y estimular la cooperación mejora la dinámica laboral. Tratar con clientes, proveedores, empleados y más debe ser algo natural en función de lo que quieres lograr.

 

  • Destrezas conceptuales. Más allá de la formulación de ideas en la cabeza para llevarlas a cabo, tienes que saber cómo articularlas de forma clara. Esta labor de comunicación incluye el desarrollo de conceptos innovadores, comprender relaciones abstractas y resolución creativa de problemas que puedas expresar a tus seguidores.

 

  • Cualidades técnicas. El coaching gerencial enfatiza el desarrollo de la experticia apropiada de acuerdo al nivel de mando que se tiene. Este proceso de aprendizaje se fundamente en herramientas y técnicas eficaces para ejercer el cargo con mayor capacidad de resolución.

Habilidades específicas dentro del coaching gerencial

El propósito del coaching gerencial es darte las bases para maximizar las aptitudes que ya tienes para ir trabajando progresivamente en las que requieren más esfuerzo. Un buen líder se distingue por varias habilidades:

  • Establece metas claras. Los objetivos individuales y grupales son esenciales para dirigir el esfuerzo en equipo hacia una misma dirección. Con metas medibles que puedes monitorear, garantizas una dinámica más eficiente.

 

  • Sabe delegar. Un jefe que no sepa delegar está condenado a hacerlo todo por sí mismo. Otorgarles confianza a tus colaboradores les da autoestima, te permite lograr más cosas y reduces la necesidad de controlar cada detalle.

 

  • Reconoce el talento. Cada empleado entra a una empresa con el propósito de dar lo mejor de sí. Sin embargo, no reconocer su labor afecta su desempeño, autovaloración y compromiso. Basta unos pocos gestos para hacer que el personal se sienta valorado.

 

  • Cuida a sus colaboradores. Además de procurar su bienestar dentro del negocio, un buen líder atiende a su gente. Esto significa que les dedica tiempo a escuchar sus iniciativas, busca resolver sus necesidades y facilita su desarrollo profesional.

 

  • Tiene visión de futuro. A todos nos encantan las soluciones rápidas a problemas urgentes, pero son medidas paliativas. Un CEO o CFO que se preocupa, mira más allá y apela a servicios de consultoría para establecer estrategias tan efectivas como

Los líderes pueden nacer o hacerse, pero siempre van a necesitar un coaching gerencial para sacar todo su potencial de liderazgo. Con nuestros métodos, herramientas y personal dedicado, podemos prepararte para que apliques un estilo de liderazgo más efectivo acorde a tu personalidad.