La planificación forma parte de nuestra naturaleza cuando tratamos alcanzar alguna meta u objetivo. Se trata de un proceso organizado que por lo general cumple ciertas etapas: propósito, tiempo límite, recursos y ejecución. Como consultores de empresas, te contamos un poco más sobre su componente estratégico en el mundo de los negocios.

Fases de la planificación estratégica según los consultores de empresas

Los consultores de empresas son muy precisos al señalar que la planificación estratégica no es muy diferente a planear unas vacaciones. Mientras el análisis considera otros elementos, en el fondo se persigue un fin. Lo importante es tener en cuenta las variables específicas del caso para hacer la hoja de ruta correspondiente.

Sin importar el tamaño de la empresa, el modelo que emplees variará en tiempo y efectividad de ejecución. Teniendo esto en cuenta, podemos describir las etapas básicas de este proceso así:

  • Análisis situacional. Antes de empezar, necesitas conocer tu situación actual con relación al mercado, la competencia y el funcionamiento interno. Se recomienda usar una evaluación DOFA o SWOT para determinar hacia dónde va el negocio, los recursos disponibles, los posibles retos y quiénes son tus posibles competidores.
  • Definir objetivos. La investigación previa debe servir para establecer las metas a largo plazo (5 a 10 años). Los objetivos pueden ser varios, pero deben estar orientados en relación a la cultura organizacional, misión, visión y valores de la empresa. Además de formular la estrategia, incluyendo informes, tácticas y planes de respaldo, es fundamental comunicarla los involucrados.
  • Establecer acciones concretas. Hablamos de las tácticas que componen al plan estratégico general para lograr su ejecución. Esto implica seleccionar líderes, asignar tareas, establecer recursos disponibles, definir plazos, orientar la gestión y comunicar debidamente las situaciones o dificultades a enfrentar durante esta etapa.
  • Iniciar la ejecución. Una vez definidas las tácticas, se pasa a su implementación práctica. En esta fase son comunes las inconsistencias entre lo planificado y el resultado real. Además de poner a prueba las decisiones tomadas, los consultores de empresas enfatizan el uso adecuado de recursos y la participación decidida de todo el personal.
  • Realizar el informe. Al igual que una certificación de calidad, el registro de los procesos resulta crítico para el análisis posterior. La idea es crear protocolos replicables que se ajusten a determinados escenarios factibles a mediano plazo. Si bien la dinámica de una compañía es muy cambiante, estos reportes detallados pueden brindar una mayor consistencia operativa.
  • Monitorear y ajustar. La planificación estratégica debe regirse por una vigilancia constante durante cada etapa. Esta especie de auditoría sirve para corregir las desviaciones, entender los objetivos inconclusos y el cumplimiento de los costos. Dada su importancia, este proceso está destinado a establecer las pautas de eficiencia operativa y financiera que se ajustan a lo que quieres lograr como empresa.

Cada organización tiene sus particularidades y necesita adaptar la planificación estratégica en base a éstas. Esto puede significar variaciones durante el proceso. Si necesitas asesoría para descifrar este proceso, nuestros experimentados consultores de empresas están para ayudarte a ejecutarlo exitosamente.